Harry Quinn combatió en Vietnam, y a los treinta y un años ha visto y vivido demasiado. Ahora está en Oaxaca, en México. Rae, una de las pocas mujeres que ha amado, con la que intentó vivir y de la que se ha separado hace unos meses, le ha pedido que se encuentre con ella en esa ciudad para ayudarla a sacar a su hermano Sonny de la cárcel.