El libro reúne colaboraciones de autoras y críticos que investigan, a partir de producciones literarias y culturales, los procesos de negociación y reflexión de las identidades judeo-latinoamericanas en los siglos XX y XXI, sobre todo en el Cono Sur. Se destaca el rol que desempeñó y desempeña la cultura judía en sus multifacéticos expresiones en América Latina.