Este libro es una secuencia rebosante de aventuras, encuentros, fagocitaciones, seducciones y fugas, pero también la historia de una autoeducación salvaje que nos transporta desde una dura infancia en la campiña bresciana a las luminarias de París y hasta la siguiente dereiva, porque la vocación del protagonista le impulsa a evadirse de toda la experiencia que tienda a replegarse sobre sí misma.