Cuando ella le pidió fuego y se marchó, Alfonso decidió que en sus sueños la llamaría Bárbara. Sus labios se instalaron en su fantasía hasta que pudo volver a verlos realmente en alguien que no se llamaba Bárbara. Un viaje por Madrid y sus calles, su lenguaje y sus costumbres, en esta narración intimista (enlazada con una vieja historia sobre la Guerra Civil), para lectores de nivel avanzado.